Los agricultores de Castilla y León están sufriendo las consecuencias de la actual superpoblación de topillos. Estos pequeños roedores, que aparecen en campos y acequias, arrasan los cultivos y transmiten diversas enfermedades. En 2007 ya lucharon contra una plaga similar, pero ahora la ley prohíbe las quemas. Los agricultores temen pérdidas millonarias.

"No hay un número normal de topillos, lo que hay es una superpoblación", afirma el secretario general de la Unión de Pequeños Aagricultores y Ganaderos de Palencia, Raúl Azpeleta.

El repunte de estos roedores en la zona de Tierra de Campos preocupa a muchas organizaciones de agricultores, que advierten que puede haber "una plaga muy importante" de aquí a septiembre. César, un agricultor que sufrió tularemia a raíz de un contagio por esos animales, explica que se trata de una enfermedad crónica que sufrirá toda su vida.

La medidas que en 2007 se llevaron a cabo para acabar con las plagas son ahora ilegales, por lo que los agricultores de la zona tienen que ingeniárselas para limpiar sus campos. Una de las soluciones más prácticas es la implantación de 'cajas nido', que atraen a aves rapaces, predadores naturales de los topillos.