"¿Tú también estás buscando bichos?", le ha preguntado un anciano con garrote a una chica joven que, armada con un Iphone, estaba dedicada a cazar un 'charmander' en la plaza de la Olivereta, en el barrio de Badal de Barcelona.

Donde es más visible el fenómeno es en las playas de la capital catalana, abarrotadas de turistas y barceloneses. Numerosos bañistas deambulan por la playa de la Barceloneta para intentar capturar pokémon.

Algunos bañistas comentaban el fenómeno y le explicaban a sus amigos que aún no sabían del juego en qué consiste la nueva 'bomba' de Nintendo. El fenómeno del juego Pokémon Go está superando cualquier éxito anterior.

Se trata de capturar los diferentes tipos de pokémon, más de un centenar, que van apareciendo en los lugares más insospechados de la vía pública utilizando una aplicación que se guía por un mapa real de la ciudad vía satélite y avisa si te encuentras cerca de uno de los 'bichos'.

Cuando apuntas con tu móvil, que has de cargar previamente con unas bolas que se disparan, y aparece un pokémon en la pantalla lo tienes que atrapar arrojándole una de las bolas y sumarlo así a tu elenco de estas figuritas.

Cuando tu elenco de pokémon capturados ya es abultado, puedes entrenarlos acudiendo con tu móvil a los gimnasios, también virtuales, establecidos por la ciudad y prepararles allí para que entren en combate.

Los turistas que visitan la Casa Batlló y otros monumentos de la ciudad aprovechaban la espera para 'cazar' también con sus móviles los 'pikachus' que Nintendo ha esparcido virtualmente por los lugares más concurridos de la ciudad.

El parque de la Ciudadela ha sido otro de los lugares más concurridos en la capital catalana por los ansiosos seguidores del nuevo juego. Allí buscaban los pokémons entre arbustos, plantas, por encima del césped, en el paseo de los Tilos, junto al edificio del Parlament...