El Consejo de Ministros aprobará mañana el Real Decreto por el que se rebajará el límite máximo de velocidad de 100 a 90 kilómetros por hora en las vías secundarias, que son las que registran más accidentes mortales. La medida estaba en la agenda del ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska y del director de la DGT, Pere Navarro, después de que ambos mostrasen su intención de apostar por reformas puntuales, en vez de reformar la ley de Tráfico en su totalidad.

Entre las medidas más destacadas previstas para el 2019 está la de reducir a 90 km/h el límite por carreteras secundarias. Además, reducir el límite a 30 km/h por ciudad en vías de un solo carril o aumentar la penalización por usar el teléfono móvil al volante, llegando a la retirada de 6 puntos si conduces bajo esta imprudencia.

Según ha expresado Navarro en varias ocasiones, el objetivo de rebajar el límite de la velocidad en las vías convencionales es que España se homologue con otros países europeos como Francia, que recientemente ha reducido a 80km/h y se sitúe más en sintonía con Bélgica, Croacia, Grecia, Italia, o Portugal, que tienen un máximo de 90 km/h en este tipo de vías.

Precisamente, las carreteras convencionales, con un carril por cada sentido, son las que acumulan el 77 por ciento de los fallecidos, donde la mitad de los accidentes se produce por una salida de vía y, como norma general, por exceso de velocidad. La intención de Tráfico es que la reducción de la velocidad sea efectiva en los primeros meses del año.

Además, cambios en el examen de conducir

La reforma normativa que prepara la DGT también recoge algunos cambios en el sistema de formación vial y de exámenes. La medida más señalada es la de la obligación de hacer un curso teórico y presencial de 8 horas para poder presentarse al examen teórico. También cambios en el práctico. Si suspendes un examen deberás de recibir al menos 5 clases prácticas antes de poder hacer el examen de nuevo.