El padre de los dos menores asesinados en Godella, en Valencia, ya ha pasado a disposición judicial. Ha sido el primero en declarar ante el juez. Algo que podría hacer también la madre a lo largo de este sábado.

De momento, ella ha sido trasladada, por orden judicial, a la unidad de psiquiatría del hospital de Llíria. Será un forense quien determine si podría ser o no imputada penalmente.

A pesar de que la abuela materna alertó esta misma semana a los servicios sociales hasta en dos ocasiones de la situación problemática de su hija, no se pudo hacer nada por evitar la tragedia.

Para algunos expertos, la Administración podría anticiparse a este tipo de situaciones si los servicios sociales tuviesen instrumentos suficientes para intervenir.

"El protocolo deseable sería que nuestros servicios sociales pudieran detectar a través de mecanismos de inspección ordinarios estas situaciones de riesgo para elevar rápidamente el informe a la Administración autonómica y que esta hubiese declarado rápidamente el desamparo de los menores y hubiese asumido la tutela", declaró el juez Joaquim Bosch en Más Vale Tarde.

La investigación por la muerte de los pequeños de tres años y medio y cinco meses sigue en marcha y se encuentra bajo secreto de sumario.

A la espera de la publicación del informe preliminar sobre lo ocurrido, que aclararía la causa concreta de su muerte, todo apunta a que podrían haber fallecido por traumatismos en la cabeza. De ahí que los padres, a quienes de momento se les imputa un supuesto delito de homicidio, podrían ser acusados de asesinato.