Una de las causas se
había abierto a raíz de una denuncia por amenazas interpuesta por su expareja y
madre de las menores y otra tras recibir un parte médico, sin que mediara
denuncia de la madre. Ambos procedimientos se archivaron a petición del fiscal
y de la propia víctima. Una diligencia policial de valoración de riesgo a la
que se sometió a la exmujer arrojó un resultado de "riesgo bajo",
según la misma fuente.
El Juzgado de
Instrucción número 4 de Castellón, en funciones de guardia, ha intervenido esta
madrugada en el levantamiento de los cadáveres de dos niñas y del padre, aunque
al fallecer el presunto autor del doble crimen se extingue la responsabilidad
penal. El investigado, ahora fallecido, no tenía antecedentes penales ni le
constaban episodios previos de violencia doméstica.
La primera causa se
incoó el pasado mes de enero. En esa fecha, el Juzgado de Violencia sobre la
Mujer de Castellón abrió un procedimiento tras recibir un parte médico. En su
comparecencia ante el juez, la mujer y madre de las menores se acogió a su
derecho a no declarar. Según el TSJCV, sin parte de lesiones y sin el
testimonio de la víctima, el fiscal solicitó el sobreseimiento de la causa y el
juzgado la acordó.
El pasado mes de
febrero, el día 24, la mujer denunció por amenazas en el Juzgado de Guardia a
su expareja y padre de las menores. Lo hizo 15 días después de que el Juzgado
de Familia fijara medidas provisionales para regular el régimen de visitas y el
uso de la vivienda en base al convenio regulador que los padres habían
alcanzado de mutuo acuerdo.
Según el TSJCV, tras una
discusión con su expareja cuando procedían a intercambiarse a las niñas, la
mujer interpuso la denuncia, solicitó una orden de alejamiento y mostró su
disconformidad con las medidas provisionales que habían sido fijadas tras el
acuerdo entre los progenitores de las menores.
En ese momento, el
fiscal no consideró necesaria la adopción de medidas cautelares y se opuso a la
concesión del alejamiento. El Juzgado de Guardia denegó la orden. Al día
siguiente, la decisión fue revisada por el Juzgado de Violencia Sobre la Mujer
de Castellón, competente en la materia. Tras esta nueva comparecencia y de
conformidad con el criterio del fiscal, se volvió a denegar la orden de
alejamiento.
La denunciante recurrió
esa decisión judicial, pero mientras se tramitaba su recurso, "desistió de
seguir adelante" y el auto denegatorio de la orden de alejamiento
"cobró firmeza", ha explicado el TSJCV. El procedimiento por las
supuestas amenazas siguió tramitándose. Tras la práctica de las diligencias
solicitadas por las partes, el fiscal solicitó el sobreseimiento. La víctima,
personada como acusación particular, también pidió el archivo. Al no existir
ninguna parte que ejerciera la acusación, el Juzgado de Violencia sobre la
Mujer sobreseyó el procedimiento.