Destrozados, todavía no pueden entender cómo su hija de cuatro años murió ahogada en una clase de natación donde debía de estar vigilada por monitores. "Estuvo fatal, mucho tiempo y nadie vio nada", asegura su padre.

Se percataron de su ausencia, después de que todos los alumnos se ducharan. Cuando encontraron en un banco su albornoz y sus chanclas, según el atestado al que ha tenido acceso laSexta.

"Fue entonces cuando su profesora dio la voz de alarma, fueron a buscarla y se la encontraron flotando en el agua", añade su padre.

La monitora que estaba cuidando a la niña contó a los Mossos que ella es socorrista, pero ese día tuvo que sustituir a la monitora habitual. Ahora, se investiga si entonces se cubrieron todos los puestos de trabajo o si la seguridad de la instalación no estuvo 100% cubierta.

"Es muy grave, nadie estuvo pendiente de la niña, nadie sabía que estaba en aquella piscina", destaca el padre.

La propia monitora cuenta que tuvo que salir del agua a por una silla de ruedas para otra alumna pero que dos profesores vigilaban mientras a su grupo. Los agentes investigan si todos los trabajadores cumplieron con su función. Los investigados declararán ante el juez.