El nuevo protocolo para identificar y perseguir los delitos de odio ha sido presentado por el Ministerio del Interior. El año pasado se registraron más de 1000 en toda España.

Interior quiere que las víctimas se sientan protegidas y denuncien los ataques que han sufrido. Por eso, a partir de ahora, las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado contarán con unas pautas precisas para elaborar los atestados policiales.

El objetivo es dotar a los fiscales y a los jueces de indicios suficientes que permitan formular cargos de imputación y, en su caso, condenas. 

El nuevo protocolo también hace hincapié en los ataques e insultos vertidos a través de las redes sociales o en acontecimientos deportivos. La Policía y la Guardia Civil deberán identificar e investigar los mensajes que inciten a la violencia, el odio y a la discriminación.

"Ser duros contra la violencia verbal puede prevenir posteriores delitos", declaraba el secretario de Estado de sefuridad Francisco Martínez.

Interior ha puesto en marcha un nuevo apartado de apoyo a las víctimas en su página web y también repartirá trípticos informativos sobre qué son y cómo denunciar los delitos de odio para evitar que queden impunes.