La familia del bebé secuestrado del hospital de Basurto, en Bilbao, va a pedir una orden de alejamiento para la secuestradora confesa tras su puesta en libertad. Ella misma, entre sollozos, reconoció los hechos en su declaración ante la jueza de guardia y pidió un ingreso psiquiátrico. Sin embargo, hasta la celebración del juicio, está en libertad sin medidas.

Los padres del bebé lamentan la decisión de la jueza. Pedro Castro, padre del bebé, ha expresado su indignación al respecto. "Es una vergüenza que puedas cometer cualquier delito y que te puedas quedar en la calle a las 72 horas", ha declarado, al tiempo que ha señalado que pedirán la orden de alejamiento "para estar más tranquilos mentalmente". En este sentido, critican la falta de un protocolo de seguridad más controlado que evite situaciones como esta.

Por su parte, y tras nueve horas en los juzgados, la presunta secuestradora del bebé de Basurto salió escoltada por sus familiares y su letrado. "¿No lo veis que está enferma?", gritó una familiar de la mujer. La jueza entendió que había "indicios fundados" de la comisión de un delito de detención, es decir, por haber sustraído al bebé. Sin embargo, no apreció riesgo de fuga, ni de destrucción de pruebas, ni reiteración delictiva.

De esta forma, la decisión de la jueza se sostiene, según fuentes consultadas por la Sexta, por la falta de antecedentes de la joven, por el desistimiento voluntario al entregar al bebé, y por tener un entorno estable, lo que se denomina arraigo, entre otros factores.

Los informes del médico de Urgencias y de los forenses que la atendieron tampoco recomendaron su ingreso en un centro psiquiátrico, algo que tanto la joven, de 24 años, como su abogado y sus familiares solicitarán de nuevo este lunes al Servicio Vasco de Salud.