Es una demanda que se repite cada vez más por los consumidores: viajar a lugares donde no se admitan niños. "Igual que existen paquetes vacacionales para viajar con niños, existen también otro tipo de paquetes, por ejemplo, para viajar solo, con adultos.

La mayoría de las grandes cadenas hoteleras ya se han especializado algunos de sus hoteles en este tipo de oferta para este tipo de público", explica César Gutiérrez, presidente de la Federación de Agencias de Viajes.

A falta de cifras oficiales, se calcula que en España hay más de 100 establecimientos hoteleros sólo para adultos. ¿Su objetivo? Ofrecer tranquilidad y silencio a huéspedes que quieren huir del ritmo frenético diario.

El caso del hotel rural 'Casa do Batán' en Galicia es diferente. Los menores de 18 tan solo están admitidos en caso de alquilar sus cuatro habitaciones. El reducido tamaño del establecimiento es incompatible con la presencia de niños.

"Es difícil si cogemos familias no tener ruido", explica su propietaria María Luz Pena. El 'sólo adultos' es una tendencia en auge para el sector turístico y de consumo. A nivel legal, sin embargo, se considera una discriminación.

"La prohibición de acceso a menores sería equiparable a una prohibición de acceso por razones de cultura, sexo, orientación sexual. Lo que puede hacer el hotel es decir que su negocio no es recomendable para menores", señala Eugenio Ribón, presidente de la Sección de Consumo del Colegio de Abogados de Madrid. Y advierten, en caso de perjuicio, podría ser incluso sancionable por parte de la administración.