Un hombre de 36 años recibió seis puñaladas en una reyerta en el distrito de la Latina y, lejos de acudir a un centro sanitario para curar sus heridas, siguió "tomando cañas y pipas" con sus amigos. Así lo cuenta El Mundo, que recoge las primeras palabras del agredido al ser preguntado por los incrédulos médicos.
Los servicios de emergencia no daban crédito a la historia de este hombre que, tras participar en una pelea en la calle Sepúlveda, siguió de fiesta. Ni siquiera tuvo la necesidad de llamar a los servicios médicos cuando empezó a brotar la sangre de sus heridas, fueron sus amigos quienes llamaron a emergencias.
Es cierto que de las seis heridas por arma blanca, cuatro de ellas eran superficiales, pero dos heridas eran penetrantes. Por suerte ninguna había afectado a órganos vitales, algo que si podría haber causado incluso la muerte si no hubiese sido atendido con urgencia.
En esta rocambolesca historia hay un punto de comicidad. Cuando el hombre agredido fue atendido y los médicos le preguntaron porque no había avisado antes a los servicios de emergencias, él contestó: "Soy manchego, me recupero pronto".
Un hombre de 36 años recibió seis puñaladas en una reyerta en el distrito de la Latina y, lejos de acudir a un centro sanitario para curar sus heridas, siguió “tomando cañas y pipas” con sus amigos. Así lo cuenta El Mundo, que recoge las primeras palabras del agredido al ser preguntado por los incrédulos médicos.
Los servicios de emergencia no daban crédito a la historia de este hombre que, tras participar en una pelea en la calle Sepúlveda, siguió de fiesta. Ni siquiera tuvo la necesidad de llamar a los servicios médicos cuando empezó a brotar la sangre de sus heridas, fueron sus amigos quienes llamaron a emergencias.
Es cierto que de las seis heridas por arma blanca, cuatro de ellas eran superficiales, pero dos heridas eran penetrantes. Por suerte ninguna había afectado a órganos vitales, algo que si podría haber causado incluso la muerte si no hubiese sido atendido con urgencia.
En esta rocambolesca historia hay un punto de comicidad. Cuando el hombre agredido fue atendido y los médicos le preguntaron porque no había avisado antes a los servicios de emergencias, él contestó: “Soy manchego, me recupero pronto”.