Quienes presenciaron la paliza a un hombre que se enfrentó al ladrón que trataba de robarle el móvil en Poblenou, Barcelona, hablan de la brutalidad de la agresión. "Con toda la agresividad, el ladrón quería tirarse encima del hombre", describe uno de estos testigos.

Fueron momentos de desconcierto y de '"shock". "Muchos se acercaron a ayudarle, él tenía la cara ensangrentada, no decía nada", relatan los testigos sobre la víctima.

Ellos vieron cómo el ladrón, que instantes antes había intentado robarle el móvil, propinaba puñetazos a la víctima en la cabeza y la cara. También describen que, una vez la víctima estaba en el suelo, el ladrón prosiguió con patadas en la cara.

Los hechos ocurrían este martes en la calle, a plena luz del día. La víctima se encontraba en su vehículo, con la ventanilla bajada y el móvil entre las piernas, esperando a que se abriera la puerta para entrar en al parking de su vivienda. Entonces, el ladrón, que iba subido en una bicicleta, cogió el teléfono y se lo llevó rápidamente.

Sin dudarlo, la víctima inició una persecución en coche y cuando estuvo en a su altura bajó del coche para enfrentarse al ladrón. El coche, que seguía en marcha, llegó a impactar contra un edificio.

El ladrón asestó primerio varios puñetazos en la cabeza de la víctima, y cuando esta estaba ya en el suelo, le propinó una fuerte patada, también en la cara.

El agresor soltó el teléfono móvil y consiguió huir antes de que llegara la Policía. La víctima pudo hablar con los primeros agentes que se acercaron al lugar, pero empezó a no recordar lo que había pasado, una pérdida de memoria que atribuía a la patada en la cabeza.

El hombre fue trasladado en ambulancia al Hospital del Mar, donde empezó a empeorar, lo que motivó su ingreso en la unidad de críticos en situación de extrema gravedad.

Los Mossos d'Esquadra están investigando el caso y tratan de dar con el presunto asesino.

Récord de turistas en España

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Los extranjeros que llegan a nuestro país ya no solo buscan sol y playa, sino que visitan pequeños pueblos de España que llaman su atención. Es lo que se conoce como 'turismo de batallas', en el que se recuerda cómo fueron las grandes contiendas de la Guerra Civil.