La red, de origen marroquí, habría producido y distribuido en los dos últimos años 235 toneladas de prendas de ropa y calzados falsos que habrían generado unos ingresos de 5.500.000 euros, ha informado la Dirección General de la Policía.

Parte de este dinero negro era ocultado junto a cartillas y tarjetas bancarias y otros elementos contables de la organización en las mezquitas de Orense capital y la localidad orensana de Xinzo de Limia.

Las falsificaciones eran producidas en Portugal, donde se han desmantelado más de 10 fábricas, y se distribuían por "delegados zonales" en toda España.  El millón de falsificaciones intervenidas en esta operación han sido decomisadas en Madrid, Barcelona, Sevilla, Orense, Málaga, Alicante, Valencia y Portugal.