La Policía Nacional ha detenido a 35 personas y se ha incautado de más de 11 toneladas de hachís, en lo que considera una de las mayores operaciones contra el tráfico de esta droga en la península.
La policía informa en un comunicado de que la organización desmantelada controlaba todo el proceso desde la producción, la llegada a España, el empaquetado y posterior distribución por toda Europa, especialmente Francia, Bélgica, Gran Bretaña y Holanda.
La distribución se hacía camuflando la droga en depósitos de gasolina, según los responsables de la operación, que se ha desarrollado en varias fases hasta llegar a los almacenes centrales ubicados en la provincia de Toledo, donde se han hallado 8.500 kilos de hachís.
En los registros se han intervenido 150.000 euros y 14 vehículos, entre ellos dos camiones valorados en unos 400.000 euros.
OPERABAN EN VARIOS PAÍSES DE EUROPA