La familia de Wafaa Sebbah lleva siete meses de desesperación. La joven lleva desaparecida desde el pasado 14 de noviembre, día en el que se esfumó sin dejar rastro en la localidad valenciana de Carcaixent, sólo diez días después de la desaparición de Marta Calvo en una localidad cercana.

La investigación de la Guardia Civil sigue en marcha, pero todavía no hay pistas ni sospechosos que puedan llevarles a dar con su paradero. Su madre, Soraya, explica en declaraciones a 'Levante-EMV' que está desesperada: "Es muy fuerte no saber dónde está mi hija, que nadie me diga si está viva o si está..."

A pesar de esas declaraciones, sabe que "la Guardia Civil está trabajando" y explica que van a verla y a preguntarle cómo están en casa. Es consciente de que la discreción es fundamental en una investigación como la de su hija. "Sueño que está en una casa, sentada en una silla. Y me mira, me sonríe con tristeza y me dice: 'Mamá, ¿es que te has olvidado ya de buscarme?'", asegura Soraya, que revela que ya es incapaz de ver fotos de Wafaa: "No lo soporto".

La madre de la joven también explica que padece insomnio de manera constante a pesar de que toma muchos medicamentos: "Me despierto cada noche, a las tres, a las cuatro de la madrugada, porque me parece escuchar que alguien llama a la puerta, como hacía ella. Y creo que es ella, que ha vuelto, pero luego solo es otro sueño".

Lo cierto es que Soraya no es la única de la familia que está sufriendo las consecuencias de un hecho tan trágico como la desaparición de una hija. El hermano mayor de Wafaa ha dejado sus estudios de informática y el pequeño ha pasado de tener una notas excelentes en el colegio a suspender cinco asignaturas.

Las líneas de investigación de la desaprición son limitadas pero Soraya está convencida de que Wafaa se fue en contra de su voluntad: "No me quito de la cabeza que alguien se la ha llevado. Y que me necesita. Y que cree que ya nadie la está buscando. Si al menos alguien me dijese algo".

Sin pistas fiables

La búsqueda de Wafaa Sabbah sigue activa, aunque no hay una sola pista fiable de ella más allá de que su teléfono dejó de funcionar en Xàtiva.

Como ya informó laSexta, el último contacto que tuvo la joven de 19 años fue con un hombre de 70 años que le preguntó dónde estaba a las 16:00 horas del día de su desaparición. A la pregunta de este individuo Wafaa respondió que estaba en Xàtiva y que tenía poca cobertura.

Según informaron fuentes de la Guardia Civil, Wafaa tenía una vida complicada y dormía en un sofá que le alquilaba un hombre de 35 años en una casa de Carcaixent, lugar donde se había mudado recientemente.