"Soy una madre abatida por el dolor y la desesperación", así se ha expresado la madre de Marta Calvo, la joven valenciana presuntamente descuartizada por Jorge Ignacio Palma en la localidad de Manuel y cuyo cuerpo sigue desaparecido desde noviembre de 2019.

En una carta publicada por 'Levante-EMV', asegura que las palabras que definen su estado son "dolor, rabia, enfado, trizteza, impotencia, desesperación, dolor, dolor y más dolor" y apunta que se está reservando fuerzas para "seguir luchando" para que "se haga justicia".

"Marta salió con total confianza a pasar unos días con una persona que había conocido, sin miedo, con libertad, conociendo a mi hija, esperando pasar buenos momentos, y continuar con su vida. Pero no. No fue así, ese individuo se tomó la libertad de decidir que Marta ya había vivido bastante. ¿Y ahora? Su derecho a no declarar es el que nos lleva a que a día de hoy Marta no esté con nosotros", ha denunciado.

"Detrás de esto hay una niña con una vida truncada y una familia hundida"

Aunque ha agradecido la labor de la Guardia Civil y la Policía Nacional en la investigación del crimen, ha recordado que "detrás de esto hay una niña con una vida truncada, una madre destrozada" y "una familia hundida por el dolor": "Un hermano que nunca más podrá disfrutar de su hermana y unas leyes que poco ayudan. Ya no es que ayuden poco, es que nos tienen totalmente desprotegidos, vendidos a los asesinos, violadores y maltratadores. Les sale barato en este país matar, violar, vejar y maltratar".

En este sentido ha enviado un mensaje a los "políticos y jueces": "¿Ustedes sabían, que este individuo estaba en España con su permiso de residencia caducado? ¿Quién regula esto? ¿Sabían que estaba condenado por tráfico de drogas? ¿Conocían que se le puso en libertad con fianza hasta la celebración de su próximo juicio? Párense a pensar, si este señor no hubiese disfrutado de esa libertad bajo fianza, o hubiese sido deportado a su país por no estar sus papeles en regla cuando le caducaron, hoy Marta estaría conmigo, con mi familia, con sus amigos, con la gente que la amaba, y ese señor no hubiese causado este irreparable dolor sumado al de otras dos víctimas mortales, y otras ocho afectadas que también han querido denunciar lo que sufrieron en manos de este depravado individuo".

"Lo tuve de frente y me negó haber estado con ella"

La madre de Marta Calvo recuerda también que gracias a que su hija le mandó la ubicación la noche en que desapareció, ella pudo llegar a enfrentarse cara a cara con el presunto asesino de la joven. "Lo tuve de frente, me enfrenté a él y me negó haber estado con ella. Me negó incluso conocerla para entregarse semanas después en el cuertel de la Guardia Civil de Carcaixent confesando que Marta estaba fallecida y que él se había deshecho del cadáver de mi hija de una forma brutal que no soy capaz ni de pronunciar ni de escribir", apunta.

A pesar de ello, denuncia que Jorge Ignacio Palma se acoge a su derecho a no declarar y "Marta sigue sin aparecer". "¿Derecho a no declarar un delincuente asesino? ¿Sin cuerpo no hay delito? Sin cuerpo sí hay delito; claro que lo hay. Y nuestras leyes deberían de condenar estos actos dolosos que acompañan al asesinato, con condenas más fuertes si cabe que las condenas por el propio asesinato", exige.

En esta línea envía un mensaje a los políticos de cualquier signo: "Empaticen conmigo un poquito y con los padres que han pasado por mi misma situación, y piensen que no estuviésemos hablando de mi hija, piensen por un momento, dios no quiera, que fuese la hija de alguno de ustedes, piensen como se sentirían. Seguramente verían las cosas desde el dolor, y verían cómo se les generaba la necesidad de preocuparse más por estas leyes obsoletas y que no hacen justicia, y dejarían de preocuparse de otras cosas que pueden esperar, pues al lado de esta, son miserables tonterías sin importancia".

"Prisión máxima con o sin cuerpo"

La madre pide "prisión máxima con o sin cuerpo", "obligación de declarar y declarar la verdad o más pena" y "menos condescendencia con estos individuos": "Están más protegidos ellos en la cárcel que nosotros y nuestros hijos en la calle. ¡Basta ya, por favor! Hagan hagamos algo".

"Estamos totalmente desprotegidos, vivimos con miedo sumado al dolor, rabia e impotencia, mientras estos delincuentes están en las cárceles, con comida, bebida, gimnasios, todo tipo de comodidades, protegidos, cuidados, cotizando y con derecho a paro, pudiendo estudiar gratuitamente, mientras el resto de los españoles hacemos un esfuerzo por trabajar, labrarnos un futuro, poder pagar a duras penas en muchos casos los estudios de nuestros hijos, y como estas podría enumerar muchas más", denuncia.

"¿De verdad creen en la reinserción?"

"Mientras ellos solo viven coartados de su libertad, mi hija Marta Calvo Burón no vive", explica, asegurando que no cree en la reinserción: "¿Reinserción? Yo sí creo en la reinserción de un drogadicto, un ladrón, en la reinserción de delitos menores, pero, ¿un asesino o un violador? ¿De verdad creen en la reinserción? ¿No hemos visto y sufrido ya suficientes noticias, casi a diario, de asesinos y violadores reincidentes? ¿Cuántas mujeres más tienen que ser violadas o asesinadas en manos de este tipo de personas, inhumanas, sin sentimientos, por no decir lo que realmente pienso de ellos? ¿Podría ser Marta la última?".

"Hoy por hoy solo podemos rezarle, y dejar a la Policía que siga con su impecable labor, sin contaminar ni perjudicar su esfuerzo en la búsqueda de Marta, pero sé que cuento con todos y cada uno de vosotros", zanja la madre.