"No tenía más remedio que darle muerte a Isabel Carrasco, haciendo justicia y un beneficio a la humanidad". Son palabras de Montserrat González, la autora del asesinato de la Presidenta de la Diputación de León, que ha exculpado a las otras dos implicadas en el caso, su hija Montserrat Triana y la agente de Policía Local Raquel Gago.
El abogado de la defensa de González alegó un trastorno de ideas delirantes con el objetivo de reducir la condena, que cifra en ocho años y medio para la acusada. La autora confesa del crimen alegó que "la mala hierba debe cortarse" en referencia a Carrasco. El motivo del asesinato fue el acoso incesable que la presidenta de la Diputación de León ejerció sobre la hija de González.
Pendiente queda por determinar la implicación de las otras dos acusadas en el desarrollo del plan por el que Montserrat González acabó con la vida de Carrasco. Montserrat Triana, hija de la principal implicada, era consciente de los planes de su madre, aunque la defensa sostiene la culpabilidad total de la misma.
La acusación particular rechaza que la madre asuma ahora todas las culpas porque detrás del asesinato, defiende, había un plan diseñado por las tres implicadas.