Nella enseña orgullosa la foto de su nieta en su primer día de clase como Constanza. Viendo un reportaje sobre transexualidad en la televisión, su nieta, de sólo cuatro años: "Me dijo que ella no era Alan".
Como ella, Mariely Piedra ha vivido el tránsito de su hijo Gabriel. Juntos han participado en el documental 'Mi Reflejo', que busca hacer visible la realidad de familias con hijos trans. "Lo encontré una mañana vendándose los pechos y me dijo que él era un chico trans y que su cerebro no iba con el cuerpo de mujer que tenía", explica Mariely.
Lo que más miedo le dio tras descubrir que su hijo era trans fue la reacción de la sociedad, pensaba en "qué le podía ocurrir cuando fuera mayor, cómo iba a ser la vida en el instituto...".
Para la familia, no es fácil aceptar el tránsito. Mariely añade que "tienes que despedirte de tu hija, dar la bienvenida a tu hijo y pasar un duelo".
Pero, al final, lo que único que importa es la felicidad de su hijo. Gabriel recuerda que "llevaba dos vida, una dentro de casa y otra fuera".
Violeta Escabias siempre ha visto a Eli como su prima pequeña, por eso no le sorprendió su tránsito. "Desde pequeña me decía que quería jugar a las muñecas o que le dejara un vestido", destaca. Como dos jóvenes más de su edad comparten confidencias. "Da igual lo que tengas entre las piernas, tú eres lo que te consideres", añade Violeta.
Estas son tres familias con una cosa en común: aquí la felicidad no entiende de género.