Un hombre de 36 años se ha suicidado en el distrito de Leiria, en el centro de Portugal, después de presuntamente haber asesinado a su suegra y a su hija de dos años, según han informado fuentes policiales.

El individuo, al que las autoridades buscaban tras hallar los cadáveres de la mujer, de 60 años, y su nieta, de apenas dos, fue encontrado muerto en su casa de la localidad de Castanheira de Pera, en el centro del país.

Según detalles de la investigación, filtrada a la prensa por fuentes policiales, el cerco sobre su paradero se estrechó después de que a primera hora de la mañana el hombre, identificado como Pedro Henriques, llamase a los servicios de emergencia para indicar donde estaba el cuerpo de su hija.

Los agentes acudieron al lugar indicado y encontraron el cuerpo sin vida de la menor en el maletero de un vehículo en el municipio de Corroios, en el distrito de Setúbal, unos diez kilómetros al sur de Lisboa.

Horas antes, Henriques ya constaba como primer sospechoso de la muerte de su suegra, que fue degollada la tarde del lunes en su casa, también en el distrito de Setúbal, donde según varios testigos se marchó apresuradamente junto a su hija.

La principal hipótesis de las autoridades es que se trata de un nuevo caso machista en Portugal, toda vez que los dos asesinatos se produjeron después de que este lunes Henriques, descrito como un "hombre violento" por su entorno, acudiese al tribunal para dirimir con su expareja y madre de la niña la custodia de la menor.

Desde el inicio de este año nueve mujeres han sido asesinadas en Portugal "en un contexto de violencia doméstica", como se denominan en el país esta clase de crímenes.

El recuento es del Observatorio de las Mujeres Asesinadas, perteneciente a la organización Unión de Mujeres Alternativa y Respuesta (UMAR), uno de los centros de referencia en Portugal.