Roger Serafín
Condenado a 28 años de prisión el asesino y agresor sexual de Elisa Abruñedo en A Coruña
El contexto El Tribunal del Jurado declaró por unanimidad culpable de asesinato y agresión sexual a Roger Serafín Rodríguez. Confesó el crimen, pero fue su ADN, el de un hombre pelirrojo, el que le delató como asesino.

Resumen IA supervisado
Roger Serafín ha sido condenado a 28 años de prisión por el asesinato y violación de Elisa Abruñedo en 2013, en Cabanas, A Coruña. Elisa fue apuñalada y agredida sexualmente mientras paseaba cerca de su casa. La investigación inicial no logró identificar al culpable, solo contaban con la descripción de un vehículo y una muestra de ADN que indicaba que el agresor era pelirrojo. Tras una década de búsqueda, un familiar lejano permitió identificar a Serafín, quien trabajaba en un taller mecánico. Durante el juicio, confesó el crimen y fue declarado culpable por unanimidad. La familia de Elisa lamenta que su esposo, fallecido, no haya visto justicia.
* Resumen supervisado por periodistas.
Ya hay condena para el violador y asesino de Elisa Abruñedo. 28 años de prisión para Roger Serafín por apuñalarla y agredirla sexualmente en 2013. Este brutal asesinato con violación ocurrió en el municipio coruñés de Cabanas, mientras Elisa paseaba tranquilamente por el monte, cerca de su casa. Lo más sorprendente es que tardaron 10 años en detener a este hombre y que todo fue gracias a su ADN. Le delató el detalle de ser pelirrojo.
Corría el mes de septiembre del año 2013 cuando un vecino de Elisa se encontró con su cuerpo sin vida. Apareció en un camino, próximo al lugar donde vivía la víctima, el cuerpo mostraba tres puñaladas y muestras de haber sido agredida sexualmente. Pero, en un primer momento de la investigación, no había ni rastro del asesino.
De hecho, la policía solo contaba con dos pruebas para tirar del hilo. La descripción de un vehículo, que se vio por la zona en el momento del crimen, y una muestra de ADN. Eso sí, esa muestra física fue crucial. Destapó que pertenecía a un hombre con una característica específica: era portador del GEN MC1R o lo que es lo mismo, pelirrojo. Un dato que, aun teniendo en cuenta que en Galicia la población pelirroja es la mayor de toda España, acotaba y mucho el terreno.
Durante una década la Policía Judicial gallega se afanó por rastrear manualmente los libros parroquiales de la comarca y en realizar pruebas aleatorias de ADN. Un familiar lejano dio en la diana 10 años después. Roger fue detenido en el taller mecánico donde había trabajado desde el momento del crimen, sin levantar sospechas.
El Tribunal del Jurado le declaró por unanimidad culpable de asesinato y agresión sexual. Acabó confesando. De hecho, en la última sesión del juicio, Roger Serafín Rodríguez tomó la palabra para dirigirse al tribunal y reconoció que lo ocurrido fue un "momento puntual" de su vida que, según él, "no tiene nada que ver" con su forma de ser "ni con los 39 años anteriores". Añadió: "No hay forma de justificar esto, ni yo mismo puedo, no lo entiendo", ante la insistencia de los familiares de la víctima para que pidiera perdón.
12 años después, la Audiencia Provincial de A Coruña lo condena a 28 años de prisión. Ahora, la familia de Elisa Abruñedo descansa por fin. Se sienten más tranquilos, aunque lamentan de que el marido de Elisa, fallecido hace dos años, no pueda ver a Roger Serafín entrando en la cárcel.
El veredicto llega tras un juicio en el que la Fiscalía y las acusaciones particulares, en representación de los dos hijos de la víctima, solicitaron penas superiores a los 30 años de prisión. En concreto, el Ministerio Público pidió 32 años de cárcel por los delitos de asesinato y agresión sexual. Mientras que las acusaciones particulares elevaron la petición a 37 años, incluyendo agravantes como alevosía, ensañamiento, abuso de superioridad y violencia de género por la condición de mujer de la víctima.