Lucía acude semanalmente a sus sesiones de fisioterapia respiratoria. El fisioterapeuta estira y contrae sus pulmones para aumentar su capacidad y trabaja su fuerza y resistencia con un aparato especial.

Hugo es otro niño que también lo necesita, está constipado y gracias a estos masajes, el fisioterapeuta despega la mucosidad de sus pulmones para que pueda expulsarla más fácilmente.

Se trata de una nueva técnica más eficaz incluso, que los medicamentos. "Realizamos todo tipo de ejercicios, pasivos o activos, depende de la colaboración de los niños, para trabajar la capacidad pulmonar, eliminar las secreciones o fortalecer los músculos", explica José Méndez, director de la clínica Aris.

Son sencillos juegos, ejercicios y masajes para tratar las enfermedades respiratorias que tanto afectan a los más pequeños de la casa. "Está indicada desde un simple catarro hasta enfermedades agudas como son la bronquiolitis o bronquitis. Algunos tratamientos se realizan través de una serie de maniobras como pueden ser los lavados de suero", comenta Carmen Galán, experta en fisioterapia respiratoria en la clínica Vass.