Un conserje en Madrid ha sido detenido después de grabar desnudos a sus vecinos. Su método era dejar una caja de herramientas con una cámara escondida con la que conseguía captar imágenes. Fue una vecina la que se percató de un detalle que le hizo sospechar: agujeros en esa caja de herramientas.
La realidad detrás de esos agujeros fueron meses de grabaciones. La mujer mantuvo la calma, disimuló como pudo e insistió en que se fuera. Fue entonces cuando avisó a su marido y a una vecina policía.
Una vez se juntaron todos, fueron a pedirle explicaciones, momento en el que "se derrumbó", como cuentan los vecinos. El lugar en el que actuaba era una urbanización de Valdemoro donde, durante años, se ganó la confianza de los vecinos.
Tras su detención, la Guardia Civil encontró en su vivienda cinco teléfonos móviles y varios discos duros. Ahora, está en libertad a la espera de juicio.
