Con esfuerzo, se colaban por las ranuras de los contenedores para hacerse con el contenido de estos. Se trata de los 'superpiratas' del cartón, acusados de robar 16 millones de euros, según ha explicado la Guardia Civil.

Asaltaban contenedores del Ayuntamiento de Madrid, cargaban la mercancía en sus vehículos y, después, lo revendían. Una práctica que les permitió crear todo un imperio.

Con una flota de 11 camiones, la banda transportaba a diario el cartón robado hasta una empresa de reciclaje. Allí se mezclaba el material ilegal con otro que cumplía la normativa para, posteriormente, vender el cargamento a empresas del sudeste asiático.

Un procedimiento que, de acuerdo a la Guardia Civil, emplearon durante, al menos, cinco años y que dejó contenedores vacíos y operarios sin trabajo. "Trabajábamos unos cuatro o cinco meses al año y ahora el doble", ha explicado uno de los trabajadores.

La mafia estaba compuesta por 42 personas, a quienes se les acusa de organización criminal y blanqueo de capitales.