Los activistas han retirado las vallas de la calle Ofelia Nieto en forma de protesta porque se han visto obligados a parar su reconstrucción simbólica porque han encontrado restos de uralita del techo entre los escombros.
Los vecinos ya denunciaron que esta uralita levantaba un polvo que era cancerígeno y que el pasado viernes pusieron en peligro a los vecinos de toda esta zona.
Ellos siguen unidos para ganarle la batalla a un derribo que consideran totalmente ilegal. "No ha habido ninguna notificación y si no que la enseñe el Ayuntamiento de Madrid", denuncia una de las afectadas.