España ha estrenado la 'nueva normalidad' al tiempo que ha llegado el verano y la primera gran fiesta de la temporada: la Noche de San Juan. Sin embargo, será distinta a las celebraciones de otros años y las playas no se iluminarán esa noche como lo han hecho hasta ahora. Y es que las autoridades locales, autonómicas y nacionales desaconsejan su celebración.

Valencia

El Ayuntamiento de Valencia confirmó hace unas semanas la cancelación de las fiestas para evitar aglomeraciones de personas durante esta celebración en línea con la cancelación definitiva de su fiesta grande, las Fallas. Para asegurarse de ello, se ha decidido la intensificación de los controles policiales para que no se pueda acceder a las playas durante la noche del 23 al 24 de junio. Tampoco habrá hogueras en Alboraya, Calpe, Cullera, Gandia o Jávea, donde sí permitirán a pequeños grupos que cenen en la playa.

Alicante

Alicante se adelantó en la suspensión de estas fiestas a Valencia. Allí también van a desplegar un amplio dispositivo de seguridad para la noche en el que van a participar un centenar de policías locales y voluntarios de la Agrupación de Protección Civil. Su objetivo: revisar los accesos a las cinco playas de la ciudad, Postiguet, Albufereta/Almadraba, Urbanova, San Juan y Tabarca, y las calas del Cabo de la Huerta. También patrullarán durante toa la noche para evitar la tradicionales hogueras en la arena.

Castellón

Esta decisión también la comparten la mayoría de municipios de la provincia de Castellón y tampoco permitirán el acceso a los arenales.

En Galicia, fiestas suspendidas hasta el 1 de julio

Mientras que en Galicia, en su decreto de 'nueva normalidad', la Xunta prohíbe fiestas, verbenas y otros eventos populares y atracciones de feria hasta el 1 de julio, por lo tanto el ayuntamiento de Vigo ha prohibido las hogueras y en Lugo tampoco prenderán las tracicionales fogatas de A Piringalla, en Aceña de Olga, en Montirón o en As Gándaras.

A Coruña

El Ayuntamiento de A Coruña no permitirá las hogueras en espacios públicos y los accesos a las playas de la ciudad también permanecerán cerrados desde las 21.00 horas del 23 de junio. A Pobra era el único Concello que permitía las hogueras en espacios públicos, sin embargo, ante el último brote que deja ocho contagios en Ribeira y uno en A Pobra, el Concello ha optado por su cancelación y ha pedido a todos aquellos que se vayan a reunir en espacios privados que extremen las precauciones.

Barcelona

En Cataluña, el departamento de Interior, en la misma línea, ha aconsejado que se abran las playas en San Juan para evitar fiestas masivas y ha pedido a los ciudadanos que opten por verbenas en grupos inferiores a veinte personas. Así las cosas, las playas y chiringuitos de Barcelona cerrarán desde las 20h del día 23 hasta las 10h del día 24. Igualmente cerrarán todos los parques que reabrirán el miércoles en su horario habitual.

Los municipios barceloneses del Masnou, Premià de Mar, Vilassar de Mar y Cabrera han decidido seguir la estela de otras localidades como Badalona y también cerrarán sus playas durante la verbena de San Juan para evitar aglomeraciones como medida de prevención. No se permitirá la celebración de fiestas en las playas de ninguno de los municipios, cuyos accesos permanecerán cerrados desde las 20 horas del 23 de junio y las 8 horas del día 24.

Además, se incrementará la vigilancia con seguridad privadas, que ayudará a la Policía Local y a Protección Civil para garantizar que la ciudadanía celebra San Juan "con responsabilidad y seguridad".

Santa Cruz de Tenerife

La misma suerte han corrido las celebraciones en Santa Cruz de Tenerife, donde también se han prohibido por decreto las hogueras en cualquier espacio público del municipio.

Costa del Sol y Costa Tropical

Igual sucede en Andalucía. Todos los Ayuntamientos de la Costa del Sol, han suspendido los actos previstos para el 23 de junio y reforzarán la vigilancia de las playas para evitar concentraciones. Mientras que en la costa Tropical granadina también han optado por cerrar las playas.

La petición desde todas las administraciones es compartida, hacen un llamamiento a la responsabilidad y a la prudencia y que se cumplan las recomendaciones de las autoridades sanitarias y evitar nuevos brotes de la enfermedad.