Mirando al pasado
¿Qué pasaba en la España de Montoro en 2013? Austeridad, más impuestos, crisis inmobiliaria y desahucios
La otra cara Mientras millones de ciudadanos sufrían los recortes, el paro y los desahucios, Hacienda lanzaba una amnistía fiscal para los defraudadores. Una década después, la justicia investiga si Cristóbal Montoro benefició desde su ministerio a ciertas empresas.

Resumen IA supervisado
En 2013, España vivía uno de los momentos más críticos de la crisis económica. La burbuja inmobiliaria había estallado, la economía no mejoraba y el desempleo alcanzaba cifras alarmantes. Bajo el Gobierno de Mariano Rajoy, se implementaron medidas de austeridad, recortes y aumentos de impuestos, lideradas por Cristóbal Montoro desde el Ministerio de Hacienda. Aunque prometieron bajar impuestos, el PP hizo lo contrario, incrementando el IRPF y el IVA, mientras ofrecía una amnistía fiscal a quienes regularizaran su dinero oculto. En paralelo, el desempleo superó el 27% y se dictaron más de 49.700 desahucios. Hoy, Montoro es investigado por presuntamente beneficiar a empresas desde su posición en Hacienda.
* Resumen supervisado por periodistas.
Volvemos a 2013. Uno de los años más duros de la crisis económica. España estaba en shock: la burbuja inmobiliaria ya había estallado, la economía no levantaba cabeza y el desempleo golpeaba con una fuerza desconocida. Mientras tanto, el Gobierno de Mariano Rajoy aplicaba su receta: austeridad, recortes y subida de impuestos.
Y al frente de todo eso, Cristóbal Montoro, como ministro de Hacienda. Hoy, más de una década después, su nombre vuelve a sonar: los tribunales investigan si durante esos años maniobró desde el Ministerio para beneficiar a determinadas empresas.
Una palabra lo definía todo: austeridad
"El Gobierno ha aprobado los presupuestos. Los más austeros y duros de la democracia", contaban los informativos de laSexta. La entonces vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, lo decía sin rodeos: "Hemos empezado por ajustar las cuentas en casa".
El ajuste vino con recortes en sanidad, educación, dependencia y prestaciones. Todo con un objetivo que repetía Montoro como un mantra: "Prioridad absoluta: reducción del déficit público".
El giro fiscal del PP
Una de las mayores contradicciones del Ejecutivo llegó con la política fiscal. El PP había prometido bajadas de impuestos en campaña. Pero una vez en el Gobierno, hizo lo contrario.
"Dije que subiría los impuestos y los estoy subiendo", confesaba Rajoy. "Nuestro proyecto político era bajar impuestos y los estamos subiendo", admitía Montoro. Se elevaron el IRPF, el IVA y otros tributos. Pero no todos pagaban igual.
Mientras la mayoría veía cómo aumentaba la presión fiscal, quienes habían escondido dinero fuera de España recibieron una oferta difícil de rechazar: regularizar su situación pagando apenas un 10% de lo defraudado. Era la amnistía fiscal.
El Gobierno nunca quiso llamarla así. Pero fue exactamente eso. Y aunque en 2017 el Tribunal Constitucional la tumbó, Montoro defendió su estrategia con una frase que aún hoy resuena: "El Gobierno echó el anzuelo, porque sin un cebo mínimamente atractivo, los pececitos se van a otro sitio, o se quedan donde están, en el fondo del mar".
Récord histórico de parados y desahucios
En paralelo, los datos sociales eran devastadores. En 2013, España superó los seis millones de personas en paro. El desempleo general superaba el 27%, y el juvenil rozaba el 60%. Muchas familias apenas sobrevivían con los subsidios.
Y con el desempleo, llegó el drama habitacional. En 2013 se dictaron más de 49.700 órdenes de desahucio. Eso significa que cada día más de 130 familias eran expulsadas de su casa. "Vivir es un derecho", reclamaban en las calles.
Más de una década después, las miradas vuelven a 2013. La justicia investiga si Cristóbal Montoro —desde su puesto clave en Hacienda— pudo favorecer a determinadas empresas, en plena época de recortes y sacrificios para la mayoría. Un año en el que se pedía esfuerzo a la ciudadanía, mientras otros salían ganando.