Por qué estos días no se consideran 'ola de calor'... si hace muchísimo calor

Ni el sol da tregua de día, ni la noche permite descansar. El calor aprieta en casi toda España con subidas notables en la mitad norte y en Canarias, mientras los avisos amarillos y naranjas se extienden por buena parte del centro peninsular. En algunas zonas, los termómetros rozan ya los 39 grados, pero lo más asfixiante llega cuando se pone el sol: el calor no se va, se queda.

Las temperaturas no bajan ni de madrugada. Se viven auténticas noches tropicales, al borde de lo que los expertos llaman "noches ecuatoriales", en las que el mercurio no desciende de los 30 grados. Esta pasada noche del martes, las mínimas se han quedado entre 27 y 29 grados en municipios como Tejeda y San Bartolomé de Tirajana (Las Palmas), Osuna (Sevilla) y Santa Cruz de Tenerife. Y todo apunta a que las noches asfixiantes continuarán.

El episodio de calor continúa, pero aún no cumple los criterios técnicos para considerarse una ola de calor. Para ello, las temperaturas extremas deben mantenerse al menos durante tres días consecutivos. Sin embargo, los registros actuales se le parecen mucho. Mañana se espera una jornada especialmente sofocante: hasta siete capitales de provincia podrían alcanzar los 40 grados, y las mínimas seguirán subiendo durante la noche, que apunta a ser la más calurosa de toda la semana.

El alivio, eso sí, está en camino. A partir del viernes, una masa de aire frío de origen polar llegará por el norte peninsular. El descenso será notable: más de 10 grados en algunas zonas, que devolverán los termómetros a cifras más llevaderas, en torno a los 30 grados.