Sí, lo ha vuelto a hacer: la expresidenta de la Comunidad de Madrid ha protagonizado un nuevo incidente al volante. En esta ocasión, Esperanza Aguirre ha sido grabada conduciendo y hablando por teléfono móvil a la vez.
Como se aprecia en las imágenes, Aguirre aprovecha que tiene el vehículo parado para usar su teléfono e instantes después arranca al tiempo que mantiene una mano en el volante y la otra en el móvil.
La imprudencia de la expresidenta de la Comunidad de Madrid no queda sólo en esto, sino que va más allá. La grabación, publicada por El Confidencial, muestra cómo llega a soltar por completo el volante mientras sigue circulando."Esa es Esperanza Aguirre hablando por el móvil y conduciendo como si nada. Arranca porque ella lo vale", se oye decir a una mujer que capta el momento de la infracción.
Los hechos, una vez más, han tenido lugar en Madrid y se producen una semana después de otro incidente de Aguirre. El pasado viernes 13 la expresidenta madrileñacirculaba a tanta velocidad que no pudo frenar a tiempo ante un semáforo en rojoy se quedó parada con su coche en mitad de un paso de cebra.
Todo ocurrió en el cruce de las calles San Bernardo y Pez. Allí, durante unos interminables segundos Esperanza Aguirre tuvo que soportar impasible a varios transeúntes y conductores que la interpelaron ante su imprudencia.
Sin embargo, el mayor altercado de la expresidenta de la Comunidad de Madrid al volante fue en 2014. Sin dudarlo un segundo, Aguirre aparcó en doble fila en la Gran Vía y se dio a la fuga en el momento en el que un agente de tráfico fue a multarla.
Durante cientos de metros, los agentes le dieron el alto para que se detuviera, sin embargo, ella ignoró toda indicación y decidió proseguir su rauda marcha hasta que finalmente llegó a las puertas del garaje de su domicilio.
Su infracción se saldó con una multa y una gran polémica que acabó incluso en los tribunales. "Parece como si en España no hubiera problemas más importantes que el que le pongan una multa a una sexagenaria", llegó a asegurar al respecto. Finalmente, el juez decidió archivar la causa.