La oposición la tacha la ley de 'Seguridad Ciudadana' de ‘ley mordaza’ porque, aseguran, es represiva y trata de impedir la protesta ciudadana, penando cosas que antes no eran delito. Cuando entre en vigor, manifestarse frente al Congreso y sin autorización estará multado con hasta 30.000 euros. Conado Escobar, diputado del PP, asegura que “las manifestaciones van a ser más libres porque estarán protegidas de los violentos”.

Aunque la han suavizado porque en el borrador inicial la sanción ascendía a 600.000, la oposición lo tiene claro: “Es un ataque endemoniado a la libertad de expresión”, señala Joan Tardá, diputado de ERC.Igual ha ocurrido con la multa por grabar y difundir imágenes de los agentes de las fuerzas de seguridad: otros 30.000 euros. También baja de categoría pero de grave a leve, faltar el respeto a los agentes. En el primer borrador se multaba con 30.000 pero puede seguir costando hasta 600. Lo mismo ha pasado con escalar edificios públicos como protesta o hacer botellón.

Nuevas sanciones que la ley anterior no penaba. Tratar de impedir un desahucio puede costar 30.000 euros. La nueva ley convierte en sanciones administrativas lo que antes eran faltas del Código Penal sometidas a control judicial previo. Por la vía administrativa, la palabra de un policía tiene más peso que la de un ciudadano. Para la oposición esto limitará gravemente la tutela judicial efectiva del ciudadano.

"Han recurrido a precedentes como la ley franquista de orden público de 1959", afirma el diputado del PSOE, Antonio Trevín. Una ley rechazada en pleno por la oposición, que la mayoría absoluta del PP ha hecho posible.