El presidente interino del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Vicente Guilarte, ha desvelado que ve "difícil" que el Partido Popular y el PSOE lleguen a un acuerdo en los 15 días de ultimátum dados por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
Vicente Guilarte ha señalado en una entrevista en 'Onda Cero' que se aprecia que "puede no haber voluntad negociadora" entre las partes. "Ojalá, yo lo veo difícil porque lo que se aprecia es que puede no haber voluntad negociadora. Ese es el problema", ha explicado.
Además, ha lamentando que hay instalada una "desconfianza absoluta entre uno y otro" porque están buscando obtener "un rédito político" a la renovación del órgano de gobierno de los jueces.
Para el presidente interino del CGPJ, es complicado "obtener dos réditos políticos" sobre un mismo asunto, ya que con dos posturas enfrentadas "es inviable".
"Mientras estemos así, pues va a ser difícil", ha concluido en referencia a los contactos de los negociadores del PSOE y del PP con la vicepresidenta de la Comisión Europea encargada de Estado de derecho, Vera Jourova, para retomar las conversaciones, en pausa desde el pasado 13 de marzo.
Reitera su intención de dimitir si continúa sin renovarse el CGPJ
Durante esta entrevista, Vicente Guilarte ha aprovechado para reiterar su intención de dimitir si sigue sin renovarse el órgano de gobierno de los jueces, alegando que es consciente de que si "no pinta nada" y genera más conflictos "de los que puede arreglar", habrá llegado el momento de renunciar al cargo, que podría ser "pronto".
"Mi idea es que cuando uno no pinta nada, cuando ya uno genera más conflictos de los que puede arreglar, pues hasta aquí he llegado. Ya veremos cuándo. Pronto", ha dicho.
De esta forma, ha explicado que si todavía no ha renunciado a la Presidencia interina del CGPJ es porque teme que se utilizaría "políticamente" y no tendría "la más mínima repercusión", como ocurrió con la dimisión de su predecesor, Carlos Lesmes.
Guilarte ha manifestado sentirse como un "juguete de otras tensiones", siendo criticado desde "izquierda, derecha y centro" a pesar de haber tratado de mantener una posición neutral. "Es un poco desalentador que cuando pretendes ayudar, se te cuestiona desde todas partes", ha declarado, subrayando además que su falta de apego al cargo le da la libertad para decir lo que piensa, aunque cada vez "con más desilusión".
Por ese mismo motivo, ha resaltado que mientras crea que puede "ofrecer algo", va a seguir intentándolo, aunque le "riñan todos", incluidos los vocales del CGPJ. Sobre la posible reactivación entre PSOE Y PP para la renovación del órgano, Guilarte se ha mostrado dispuesto a ayudar en lo posible, si bien ha enfatizado en que "cuando esto ya se agote" y cuando ya no le llame "nadie a los programas de televisión o radio", se preguntará: "¿qué pinto yo aquí?".
Guilarte se desliga del plan de Pedro Sánchez
Guilarte también se ha pronunciado sobre la propuesta de Sánchez de retirar al CGPJ la facultad de nombrar magistrados del Tribunal Supremo y de los Tribunales Superiores de Justicia, negando que esté inspirada en la sugerencia que hizo para facilitar la renovación del órgano meses atrás.
"Me parece que la reinterpretación que se hace de mis de mis ideas es absurda y absolutamente falsa", ha exclamado el presidente interino del CGPJ, insistiendo en que no es cierto que haya "reculado nada" y que defiende "la misma línea" que desde el principio. En su opinión, su propuesta ha sido interpretada "aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid" para ser utilizada para los "fines propios" de otros.
También ha analizado que "es una actividad de riesgo opinar" y ha ironizado con que quizás debería haberse retractado de hacer una propuesta que facilitara la renovación del órgano, dado que tras leer "la interpretación de Sánchez" ha dudado de sí mismo y de su identidad "al mirarse al espejo".
En este sentido, ha recordado que su verdadera propuesta pasaba por un sorteo para renovar el órgano de gobierno de los jueces y que así los elegidos tuvieran un "mayor nivel de independencia" y no puedan decir que les ha nombrado un partido. Los 20 elegidos del CGPJ que corresponden a Congreso y Senado saldrían de entre 39 candidatos que el Poder Judicial ya ha remitido con anterioridad a las Cortes Generales.
La ventaja del sorteo, según Guilarte, es que puede hacerse "con carácter transitorio", aunque el problema sería elegir la lista de sorteables porque entraría de nuevo el juego político. "Hay un consejo muy, muy, muy quemado. Nos odian, con razón quizá, a mí especialmente. Entonces pues que nos quiten y hagan un sorteo entre estos 39 (propuestas por el CGPJ) que son personas aptas y pasamos a otra cosa (...) A mí como solución coyuntural me parece bien", ha concluido.