Será un marcaje férreo, una vigilancia exhaustiva. Y cuando llegue, las sugerencias que llegan desde Bruselas serán algo más que sugerencias. Según 'La Vanguardia' , Olli Rehn, el vicepresidente de la Comisión Europea quiere que en menos de 15 días España sea expedientada por sus desequilibrios económicos.
Lo que en la práctica sería apretar aún más las tuercas a nuestro país. Lo sorprendente es que la intención de Olli Rehn tiraría por tierra las palabras de otro de los vicepresidentes de la Comisión y se llevaría por delante algunas de las frases más repetidas por el Gobierno últimamente: "Que ya no hace falta más”.
Pero la vigilancia de Europa desde luego implicaría nuevas reformas. Contrato único, bajada de las pensiones, subida de impuestos y privatización de empresas públicas tienen todas las papeletas.