El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, no se siente ofendido por su compañera de gabinete Dolores de Delgado y ha insistido en que más allá de las palabras, lo importante son los hechos.

Marlaska ha reiterado estas manifestaciones en los pasillos del Senado antes de la sesión de control al Gobierno ante las preguntas de los periodistas, que han querido saber si la grabación difundida en la que supuestamente la ministra de Justicia le llamaba "maricón" le habían ofendido.

Tras reiterar que lo importante son los hechos y no las palabras, el titular de Interior ha dicho también que Delgado no tenía por qué disculparse, porque para hacerlo se ha tenido que ofender o haber querido ofender.