El pasado miércoles, el independentista catalán volvió a protagonizar una polémica en el Pleno del Congreso al acusar a la Policía de "moler a palos" a los catalanes, retar al ministro Juan Ignacio Zoido a que le mirara a la cara y sacar unas esposas en el hemiciclo y manifestar su deseo de que el presidente Mariano Rajoy acabe detenido.
Entonces no recibió una llamada de atención, pero portavoces del PP y de Ciudadanos pusieron de manifiesto su desagrado por este tipo de episodios. Ya por tarde, Ana Pastor anunció su intención de apercibir en privado al diputado de ERC para tratar de frenar más polémicas de estas características.
Finalmente, la presidenta de la Cámara ha recibido esta tarde en su despacho al parlamentario de ERC, con el que ha estado conversando durante aproximadamente media hora, según precisaron las mismas fuentes.
Pastor le ha llamado la víspera del Pleno de control, en el que Rufián tiene previsto dirigir una pregunta al presidente Mariano Rajoy para pedirle que se pronuncie si respetará los resultados de las elecciones del próximo 21 de diciembre en caso de ganar el independentismo.
La intención de la presidenta era recordar a Rufián la importancia de guardar el debido respeto y las formas en sede parlamentaria con el fin de preservar la imagen de la institución. Preguntado sobre los términos de esa charla, el dirigente de ERC se ha limitado a contestar con un "todo bien".
Además del de las esposas, Rufián acumula otros 'shows'. Dos semanas antes del referéndum del 1 de octubre, el diputado catalán aprovechó otra pregunta de control al Gobierno para sacar, en esta ocasión, una impresora con el fin de pedir al Ejecutivo que dejase de "perseguir" a los organizadores de esa consulta. Tampoco en esa ocasión, Pastor le llamó al orden.
Sí lo hizo en los dos episodios anteriores protagonizados por el mismo diputado en el hemiciclo. Uno de ellos tuvo lugar hace poco más de un año, durante el debate de investidura de Mariano Rajoy, cuando utilizó duras palabras para atacar a los socialistas, a los que acusó de "traidores" y de doblegarse a los intereses de los grandes consejos de administración.
Pese a la invitación que le hizo Pastor para que retirara las gruesas palabras que utilizó, Rufián hizo caso omiso, al igual que en otra reciente intervención en el Pleno, en la que llamó "miserable" el titular de Interior por los obstáculos que estaba poniendo el Gobierno a nuevas plazas para Mossos d'Esquadra.
En esta ocasión, la presidenta del Congreso le invitó a retirar la palabra, pero ante la negativa del diputado catalán, la presidenta decidió 'motu proprio' que ordenaría el borrado de ese insulto del Diario de Sesiones.