El nuevo intento de la comunidad mundial para frenar el cambio climático ha comenzado. Esta vez, el escenario protagonista elegido para la COP27 es Egipto. Sin embargo, se trata de una cumbre que ya de inicio arranca descafeinada. Y es que a este evento no acuden China ni India, dos de las tres economías más contaminantes del mundo. Además, se llega con una pobre meta: mantener el objetivo de un grado y medio pactado hace un año en Glasgow. Un acuerdo que, de hecho, ya era de mínimos.

"El último informe del clima global es una muestra del caos climático. Cambios pasando a una velocidad catastrófica, devastando vidas en cada continente", ha denunciado el secretario general de la Organización de Naciones Unidas (ONU), António Guterres. Mucho ha cambiado en estos 12 meses. Lo principal: la guerra de ucrania que ha provocado una crisis energética y ha resucitado los combustibles fósiles.

En concreto, el consumo de carbón ha batido récords este año y ha llevado a países como Reino Unido o Alemania, hasta ahora de los más ambiciosos, a posponer sus planes de emisiones cero. Al mismo tiempo, el año 2022 ha dejado patentes las consecuencias de esta falta de acción: meses de sequía en China, inundaciones Pakistán, incendios desde Siberia hasta California y una ola de calor histórica en Europa.

De hecho, lograr fondos de compensación para catástrofes es otro de los puntos de la reunión. Los últimos meses también se han visto cada vez más acciones de desobediencia civil; sentadas frente a jets privados, a las puertas de fábricas contaminantes o cortes de tráfico en las ciudades. Unas protestas que sin embargo no se verán en Egipto, un país que reprime con violencia las manifestaciones pacíficas, según denuncian las ONG. Activistas como Greta Thunberg, de hecho, han llamado a boicotear la cumbre y no acudirán.

Entre los mandatarios internacionales que intervendrán en la sesión de este lunes está el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, que por cuestiones de agenda sólo participará en la primera parte de la COP27 denominada Cumbre de la Implementación.

Entre los asistentes destacan los recién nombrados primeros ministros de Reino Unido, el conservador Rishi Sunak, que ha acudido a la cita tras las críticas recibidas en su país a su decisión inicial de no asistir; y de Italia, la ultraderechista, Giorgia Meloni.

Según datos de la organización, durante estas dos jornadas de máximo nivel político intervendrán ante el plenario de la COP27 cerca de cien jefes de Estado y de Gobierno de todo el mundo, con especial relevancia de África.