Camina con los brazos en alto en el punto de mira de las armas de la Policía. Un hombre negro de 40 años vuelve caminando a su coche cuando decide darse la vuelta, momento en el que un agente le da una descarga con su pistola eléctrica. Desde el helicóptero le prejuzgan solo por su raza.
"Parece un tipo de los malos. Podría estar involucrado en algo", afirma un agente desde el helicóptero. Y acto seguido, una policía le dispara mortalmente. El hombre cae al suelo desplomado con una herida de bala abierta en su pecho. Ni siquiera iba armado y no se mostró agresivo.
Ahora su hermana gemela exclama justicia. "Pedimos que inmediatamente se presenten cargos contra la oficial. Su incompetencia le quitó la vida a mi hermano", reclama. Además, la familia ha anunciado que encabezará protestas contra la violencia racial y la brutalidad policial, pero, ante todo, desean que sean pacíficas.
El Departamento de Justicia, por enésima vez en un caso así, ha abierto una investigación, y la agente responsable del fatal disparo ha sido suspendida hasta que todo se esclarezca.