Un candidato del partido nacionalista hindú Bharatiya Janata Party (BJP) ha sido asaltado por miembros del Trinamool Congress (TMC), el partido de la oposición; este es uno de los ejemplos de violencia política que sufre el país, sobre todo en periodo de elecciones.

La Comisión Electoral dividió el periodo político en siete fases por la inestabilidad y la magnitud de la violencia. Según Bhuiya, un trabajador social, los votantes son amenazados por matones a sueldo. "Puedo decir que el camino desde casa al centro de votación, a uno o dos kilómetros de distancia, es muy largo, porque a diferencia de dentro de los colegios, en la vía no hay seguridad ni protección oficial", explica para recalcar que las fuerzas de seguridad son ineficientes en el país.

Hasta ahora han sido completadas cinco de las fases, y se han producido gran cantidad de incidentes, como el de una persona fallecida y 12 heridas en unos enfrentamientos entre simpatizantes de dos grupos rivales.

Según cuenta el profesor Jamal Mitra Chenoy, de la Universidad Jawaharlal Nehry: "La violencia es el resultado de los enfrentamientos entre el TMC y el BJP". Las causas de que se lleven a cabo estos incidentes violentos están motivadas por los principales partidos que se postulan en las elecciones.

Mientras que la legisladora del TMC, Partha Bhowmick, asegura que cualquier problema en Bengala está siendo creado por el BJP mientras incitan a la gente dando discursos provocativos. Por otro lado, el BJP acusa al TMC de bloquear al resto de partidos de la región e intimidar a la gente mediante la agresión a las fuerzas del orden y la destrucción del material de campaña de los opositores.

Sin embargo, este problema de la cultura de la violencia política en el país es mucho anterior al conflicto que existe entre ambos partidos; se remonta a los años 70, cuando el Partido Comunista utilizó este tipo de acciones para consolidarse durante más de 30 años en el poder.