El Gobierno indio ha condenado las agresiones sexuales contra mujeres que se produjeron el pasado Fin de Año en Bangalore (sur), un abuso que ha indignado al país asiático y por el que aún no hay detenidos.

El viceministro de Interior indio, Kiren Rijiju, ha lamentado en su cuenta de Twitter el "vergonzoso acoso" que tuvo lugar contra varias mujeres durante la celebración de fin de año en una popular y concurrida avenida de Bangalore, un suceso que, ha asegurado, no debe quedar impune.

Una fuente de la Policía local ha detallado que hasta el momento no hay detenidos por los incidentes que tuvieron lugar en fin de año. Las supuestas agresiones sexuales, que han desatado la indignación en la India, fueron denunciadas a través de unas fotografías publicadas por medios locales en las que se aprecia a distintas mujeres rodeadas por una turba o protegidas por miembros de las fuerzas de seguridad o por sus propios acompañantes.

Tras la difusión de las imágenes, G. Parameshwara, ministro de Interior del estado de Karnataka, del que es capital Bangalore, ha apuntado que las mujeres fueron agredidas debido "a su estilo de vestir occidental" y aseguró que el acoso es habitual "durante este tipo de eventos".

Las declaraciones del dirigente han generado un contundente rechazo en las redes sociales y por parte de activistas por los derechos de la mujer. Rijiju, por su parte, ha condenado las comentarios "irresponsables" del mandatario de Karnataka y ha pedido a las fuerzas de seguridad que detengan y "pongan entre rejas" a los acosadores.

La violencia machista es uno de los mayores problemas a los que se enfrenta la India, que endureció las penas contra los agresores después de la violación y tortura de una joven en 2012, un suceso que abrió el debate sobre la situación de las mujeres en el país y que trascendió al resto del mundo. Según datos de la Agencia Nacional de Registro de Crímenes del país asiático (NCRB, en inglés), en 2015 se registraron 34.651 casos de violación en la India.