Camila no puede con la vida. El peso de la Corona británica ha conseguido doblegar a esta recia reina. Y eso que lleva menos de un mes liderándola, desde que el rey Carlos III hiciera público su cáncer. Tan solo 13 actos públicos después, ahora es ella la que causa baja por agotamiento.
Aunque, de cara a la galería, haya mantenido su sonrisa hasta el último momento. No ha ayudado que también, por la enfermedad de su mujer, el príncipe Guillermo se haya mantenido en un segundo plano. Su marido, el rey, dice estar "orgulloso y complacido" por su trabajo como reina... y con que el público esté respondiendo bien a su liderazgo.
Al menos una semana va a estar esta reina novata fuera de servicio. Se espera que reaparezca en otro servicio, el que se oficiará el próximo lunes en la Abadía de Westminster con motivo de las celebraciones por el día de la Commonwealth, fecha señalada para los del antiguo Imperio. 56 Estados participan de las celebraciones.
Pero en la agenda real oficial, Camila no aparece hasta mucho después. En ese mismo dietario comprobamos —que se lo estarán preguntando— quiénes van a representar a la Corona británica entretanto: los hermanos del Rey, príncipes Ana y Eduardo, estarán en los actos, quienes, a buen seguro, no acabarán exhaustos.
Oficialmente, la reina Camilla pasará estos días en modo balneario: reposo y familia. Y quizá, aunque sólo sea porque podría echarles un cable en esto, acordándose de Harry, el príncipe autoexiliado. Las Casas Reales británicas esperan que no se repitan las especulaciones, como viene ocurriendo con Kate. El sábado, el Palacio de Kensington arremetió contra la "locura de las redes sociales" después de que se desbocaran en internet las teorías sobre la Princesa de Gales y su salud.