Explicación en redes
Por qué la hija de Hulk Hogan decidió no acudir al funeral de su padre
La leyenda de la lucha libre murió a los 71 años murió el 24 de julio y no ha sido hasta el 5 de agosto cuando se celebró su funeral, en un entorno privado: su hija no acudió.

El 24 de julio, se anunciaba la muerte de Hulk Hogan. A los 71 años, la leyenda de la lucha libre, cuyo nombre real era Terry Bolea, fallecía después de sufrir una parada cardiaca: los médicos acudieron a su casa enseguida, pero nada pudieron hacer por salvar su vida. Hogan padecía leucemia y una enfermedad que le provocaba arritmias cardiacas.
Dos semanas después, el entorno de Hogan ha celebrado un funeral privado para despedirse de él, en la misma iglesia en la que Bolea fue bautizado en 2023. El gobernador del estado de Florida, Ron DeSantis, ordenó que las banderas ondearan a media asta en todos los edificios oficiales la semana pasada, el viernes, en lo que declaró el 'día de Hulk Hogan en Florida' y para el servicio contaron con un importante operativo de seguridad.
Decenas de personas acudieron al funeral de Hogan, cuyo cuerpo será incinerado, pero entre ellas no estaba su propia hija, Brooke Bollea Oleksy, más conocida como Brooke Hogan. Pero ella misma ha querido despedirse de su padre y explicar las razones que la llevaron a decidir no acudir al servicio.
"Mi padre odiaba el morbo de los funerales. No quería [que se celebrara] uno. Y aunque sé que la gente sufre de muchas maneras y estoy agradecida por las celebraciones y eventos que se están organizando en todo el mundo para honrarlo, como su hija, tuve que tomar la decisión de honrarlo de la mejor y más genuina manera que he podido: en privado. Esa era la manera que me hacía sentir más cerca de él", ha escrito en una publicación en redes sociales, acompañando sus palabras de varias imágenes tomadas en la playa con su pareja y sus hijos.
"Lo único que ha faltado hoy era verlo en su silla plegable mirando las olas... y el atardecer", ha añadido. "Papá, te honramos de la manera más sencilla, que me llegó al alma", ha continuado. "Hemos llevado a nuestros bebés a la playa y los hemos metido en las mismas aguas saladas que a ti te encantaban. A Molly le encantó el agua. Creo que será un 'pececito', como tú me llamabas a mí. Te queremos y honramos las cosas que te hicieron tan especial. Cada grano de arena y cada ola me han recordado que era tu bebé de playa y nos han acercado más a ti. Rezo para que estés en paz y sepas cuánto te quiero. Descansa en el cielo, papi".