La líder de la ultraderechista Agrupación Nacional, Marine Le Pen, instó al presidente francés, Emmanuel Macron, a disolver la Asamblea Nacional y convocar elecciones legislativas "para conocer la verdadera opinión del país".

Tras conseguir la victoria en las europeas -según todas las estimaciones- Le Pen compareció para reclamar a Macron que "saque las conclusiones, porque había puesto su crédito presidencial en un referéndum sobre sus políticas y su persona", por lo que, su juicio, "no tiene otra opción que disolver la Asamblea Nacional".

La líder ultraderechista había avisado durante la campaña que una derrota del partido "macronista", La República en Marcha, debería conllevar la dimisión del presidente, aunque no fue tan lejos, al pedir en su lugar la convocatoria de legislativas, pero no presidenciales.

Para Le Pen, los resultados de su fuerza y la de Macron demuestran "la superación de los viejos partidos" y confirman "la nueva línea divisoria, entre nacionales y mundialistas, un debate que confirma el futuro de Europa y de nuestro pueblo".

Calificó a la Agrupación Nacional de "primer partido de Francia, y, sobre todo, el partido de la futura alternancia", antes de hacer un llamamiento a figuras de la izquierda y la derecha a unirse a sus filas.