El papa Francisco ha proclamado santa a la madre Teresa de Calcuta, en una multitudinaria ceremonia en la Plaza de San Pedro en el Vaticano. Para ello, el papa ha utilizado, como es habitual, la formula en latín para proclamar la santidad de la religiosa, que murió en Calcuta en 1997, y pedir que fuese inscrita en los libros de los santos de la Iglesia.
El prefecto de la Congregación para la Causa de los Santos, el cardenal Angelo Amato, acompañado del postulador de la causa, Brian Kolodiejchuck, ha presentado a Francisco la petición de canonización de la madre Teresa. A lo que el papa pronunció la fórmula en latín:
"En honor de la Santísima Trinidad, por la exaltación de la fe católica y el incremento de la vida cristiana, con la autoridad de nuestro Señor Jesucristo y de los santos apóstoles Pedro y Pablo, después de haber reflexionado largamente e invocado la ayuda divina, y escuchando el parecer de muchos de nuestros hermanos obispos, declaramos santa a la beata Teresa de Calcuta".
Y continuó: "y la inscribimos en el Catálogo de los Santos, y establecemos que en toda la Iglesia sea devotamente honrada entre los santos".
Tras la proclamación se ha podido oír un fuerte aplauso en la Plaza de San Pedro del Vaticano, donde se han congregado 100.000 personas. La madre Teresa de Calcuta se convierte en santa 19 años después de su muerte, el 5 de septiembre, y tras un rápido proceso de canonización ya que fue proclamada beata el 19 de octubre de 2003 en otra ceremonia multitudinaria en el Vaticano.