Piden la pena de muerte
Los padres del asesino de Charlie Kirk convencieron a su hijo para que no se suicidara
Los detalles Cuando los progenitores, tras ver las imágenes de Robinson que publicó el FBI, determinaron que su hijo era el asesino le llamaron por teléfono, y fue entonces cuando el hombre, de 22 años, insinuó que planeaba suicidarse.

Resumen IA supervisado
Tyler Robinson, acusado de asesinar al activista conservador Charlie Kirk en Utah, fue convencido por sus padres para no suicidarse y entregarse a las autoridades. Tras ver las imágenes del FBI, los padres identificaron a su hijo como el tirador y lo contactaron. Robinson, de 22 años, insinuó su intención de suicidarse, pero sus padres lograron que se reuniera con ellos. Explicó que no podía ir a la cárcel y que Charlie Kirk "propagaba demasiado odio". La madre de Robinson comentó que su hijo se había politizado y apoyaba los derechos LGBT. Robinson confesó el asesinato a su pareja y dejó un mensaje planeando el crimen. Finalmente, se entregó al consejo de un amigo de la familia.
* Resumen supervisado por periodistas.
Los padres de Tyler Robinson, el presunto asesino de Charlie Kirk, convencieron a su hijo de que no se quitara la vida y se entregara a las autoridades cuando descubrieron que había sido él quien había disparado al activista conservador en el campus de una universidad de Utah.
Cuando los progenitores, tras ver las imágenes de Robinson que publicó el FBI, determinaron que su hijo era el asesino le llamaron por teléfono, contó este martes en rueda de prensa el fiscal del condado de Utah Jeff Gray, y fue entonces cuando el hombre, de 22 años, insinuó que planeaba suicidarse.
"Sus padres lograron convencerle de reunirse en su casa para hablar sobre la situación. Robinson insinuó que él era el tirador y declaró que no podía ir a la cárcel y que solo quería terminar con toda la situación", explicó Gray poco después de anunciar que pedirá la pena de muerte para el hombre, al que se le imputan siete cargos, entre ellos asesinato con agravantes, y enfrenta posible pena de muerte. Cuando los padres preguntaron a Robinson por qué lo hizo, el hombre explicó que Charlie Kirk "propagaba demasiado odio".
La madre de Robinson explicó que, durante el último año se había "politizado y había empezado a inclinarse más hacia la izquierda", defendiendo "los derechos de las personas homosexuales y transexuales", dijo Gray, que añadió que el presunto asesino comentó a su familia que "empezó a salir con su compañero de piso, un hombre biológico que estaba transicionando" a mujer.
Los progenitores convencieron a Robinson de que hablara con un amigo de la familia, un ayudante del sheriff retirado, que fue quien convenció al presunto asesino de que se entregara en el condado de Washington, donde residen los padres. La compañera sentimental de Robinson compartió con la policía un intercambio de mensajes de texto en el que el hombre confesó que había asesinado a Kirk. Robinson dejó además, debajo del teclado del apartamento, un mensaje escrito a mano para su compañero que decía "Tengo la oportunidad de eliminar a Charlie Kirk y la voy a aprovechar".
Cuando la compañera le preguntó por qué lo hizo, Robinson contestó "Ya he tenido suficiente de su odio. Hay odios con los que no se pueden negociar" y dijo que había planeado el asesinato durante algo más de una semana. Robinson le pidió que borrara todos los mensajes, le dijo que su padre se había vuelto "bastante fanático" del movimiento MAGA de Donald Trump, le anunció que se iba a entregar y le pidió que no hablará con los medios de comunicación o la policía.