Más de 10.000 soldados chechenos se prepararon entre gritos para la guerra de Ucrania. Tal y como puedes ver en el vídeo, caminaron por el norte del país y terminaron entrando en territorio ucraniano, algo que ellos mismos compartieron en sus redes sociales, donde contaron cómo era su camino hacia el frente. Así es como los soldados chechenos, la facción afín al régimen de Putin, entró en Ucrania para participar en la guerra.

"Son un grupo de mercenarios que utiliza Moscú para llevar a cabo sus acciones", señala Alberto Priego, profesor de Relaciones Internacionales de la Universidad de Comillas. Su último objetivo era, según el diario 'The Times', asesinar al presidente ucraniano, aunque no lo consiguieron,

Con la llegada de estos soldados a Ucrania, el mensaje que lanza el Kremlin es claro, según apuntan los expertos: "Quiere mandar una señal de que van con todo, que sería muy duro, y tratan de desmoralizar y reducir al máximo la resistencia ucraniana", afirma Ángel Saz-Carranza, profesor de ESADE.

En este sentido, Alberto Priego advierte de que los soldados chechenos "son bastante sanguinarios y conocidos por sus acciones violentas y violaciones de los derechos humanos". Su llegada recuerda a las dos guerras chechenas y, con ello, a la violencia que se vivió allí. "Todo lo que tiene que ver con ese conflicto genera propaganda de unos militares muy agresivos, crueles, sádicos..." destaca Ángel Saz-Carranza.

Se trata un cuerpo afín a su líder, Ramzán Kadýrov, "un personaje muy controvertido, muy agresivo, y que tiene acusaciones de violaciones de los Derechos Humanos", indica Priego. Según los expertos, se trata de un movimiento principalmente estético, aunque también estratégico, que tiene como objetivo enviar el mensaje del miedo a quienes luchen en Ucrania.