La primera ministra británica, Liz Truss, ha reconocido este viernes quesu plan fiscal fue "más lejos y más rápido"de lo que podían tolerar los mercados, por lo que ahora ha rectificado "de forma decisiva" y subirá el impuesto de sociedades como estaba previsto por el anterior Ejecutivo de Boris Johnson. "Tenemos que actuar ahora para asegurar a los mercados que tenemos responsabilidad fiscal", ha señalado, antes de añadir que hará "lo que sea necesario" para conseguir que la deuda caiga en el medio plazo.

Esta noticia se ha conocido tras el cese de Truss a su ministro de Finanzas, Kwasi Kwarteng, considerado el artífice de un polémico plan de reforma fiscalque habían puesto en duda los mercados e incluso miembros del Partido Conservador, que se plantean ahora incluso elevar la presión sobre la jefa de Gobierno. "He sentido tremendamente perderlo. Es un gran amigo y comparte mi visión", ha indicado Truss este viernes.

Lo cierto es que el plan había sido elaborado conjuntamente por los dos: el ministro cesado y la propia Truss. A preguntas de los periodistas, respondía siempre de la misma forma con gesto de disgusto: "Lo que he hecho hoy es asegurar que tenemos estabilidad económica". Todo comenzaba el 23 de septiembre, cuando anunciaban sus medidas, incluida la rebaja de impuestos a ricos. "Los altos impuestos dañan la competitividad británica", aseguraba entonces Kwarteng.

La libra se hundía y la prima de riesgo se disparaba pese a los esfuerzos de la recién estrenada primera ministra por justificarlo: "Cada libra que le quitamos a alguien es una libra que podría estar gastando en su futuro". Con estas palabras provocaba una rebelión dentro de su propio partido que obligaba, en su propia conferencia, a que dieran marcha atrás en su objetivo de bajar los impuestos a las rentas altas. Pero hoy ha sido necesario un paso más.

Tras la marcha de Kwarteng, el veterano diputado "tory" Jeremy Hunt, exministro entre otras carteras de Sanidad y de Exteriores, pasará a estar al frente de Economía. Así lo han confirmado desde Downing Street, oficina de la primera ministra, a través de sus redes sociales. Hunt, de 56 años, aspiró en 2019 y este año, sin éxito, a liderar a los conservadores. Ahora, el nuevo ministro de Economía tendrá un nuevo plan a finales de este mes.