La Embajada de Irán ha justificado que su responsable no saludara a la reina Letizia durante una recepción en el Palacio Real en que informaron a la Zarzuela de que lo que sucedería cuando recibieron la invitación.

En un comunicado, los responsables de la Embajada sostienen que avisaron a la Casa Real de que "el Embajador acudirá solo y como en otras ocasiones, recordamos que por temas protocolarios no puede estrechar la mano a Su Majestad la reina". En este sentido, critican el revuelo producido tras trascender las imágenes en los que el diplomático niega el saludo a la reina Letizia.

"Esta situación tiene una explicación absolutamente religiosa y jamás significa faltarle el respeto a la posición o la figura de una mujer", defienden.

Además, subrayan que "las embajadoras iraníes también presentan sus cartas de credenciales a los líderes de otros países sobre la misma base; saludándoles en la manera protocolar iraní". "Este hecho nunca ha sido considerando como un 'desplante' de diplomáticas iraníes hacia jefes de gobierno o estado de los países donde están asignadas, por la prensa de esos países", deploran.

Además, como colofón, defienden que en el próximo viaje a Irán de periodistas para cubrir el 44 aniversario de la victoria de la Revolución Islámica los reporteros podrán comprobar la mejora de la situación de la mujer en el país.