Cientos de niñas en Irán se han visto afectadas por lo que se creen que son gases nocivos. Las autoridades han confirmado que las menores fueron envenenadas en las aulas de varios colegios de la ciudad de Qom, provocando que muchas de ellas tuviesen que ser ingresadas en el hospital.

Los funcionarios del régimen de Irán han comunicado que estos "ataques intencionados" involucran a unas 30 escuelas. Ahora, investigan quién podría estar detrás de estos hechos que asocian a una "venganza" por las protestas contra la hiyab en el país. Un ataque que también podrían tener el objetivo de tratar de cerrar las escuelas para niñas.

Los hechos surgieron a finales de noviembre en Qom, una ciudad que se encuentra a unos 125 kilómetros al sureste de la capital de Irán, cuando los estudiantes del Conservatorio Noor Yazdanshahr comenzaron a enfermar. Esta situación volvió a repetirse en diciembre y a estos casos se sumaron el de más niños que se quejaban de fuertes dolores de cabeza y palpitaciones en el corazón.

En un primer momento las autoridades no vieron similitud entre los casos, y se empezó a especular que podría ser una intoxicación por monóxido de carbono debido a la utilización de gas natural para calentar las escuelas.

Sin embargo, finalmente el viceministro de educación de Irán, Younes Panahi, ha confirmado a los periodistas que se trata de un ataque premeditado: "Después del envenenamiento de varios estudiantes en Qom, se descubrió que algunas personas querían que se cerraran todas las escuelas, especialmente las de niñas", ha explicado en declaraciones recogidas por The Guardian.

Unas declaraciones que aprovechó para aclarar que "se ha revelado que los compuestos químicos utilizados para envenenar a los estudiantes no son productos químicos de guerra… los estudiantes envenenados no necesitan un tratamiento agresivo y un gran porcentaje de los agentes químicos utilizados son tratables".

Por su parte, el medio Irán International ha indicado que el fiscal general de Irán dice que el envenenamiento de los estudiantes en la ciudad religiosa de Qom podría ser un "acto criminal deliberado", instando a los funcionarios de la ciudad a tomar medidas decisivas en el caso.

Ali Reza Monadi, miembro del parlamento nacional que forma parte del comité de educación, indicó que "la existencia de la voluntad del diablo de impedir que las niñas reciban educación es un grave peligro y se considera una muy mala noticia", según recoge la agencia IRNA.

Esta situación ha provocado que las escuelas que se vieron afectadas de Qom tengan que cerrar, y muchas estudiantes ahora acuden a clase de manera online. El 14 de febrero, los familiares de las alumnas afectadas decidieron manifestarse frente a la oficina del gobernador.

Una joven ha perdido la vida

El gobierno iraní asegura estar investigando todos estos casos y señala a grupos extremistas. Lo cataloga como "terrorismo biológico" como represalia por las protestas de las jóvenes iraníes contra la imposición del hiyab. Sin embargo, activistas aseguran que no es la realidad.

"Si es un grupo extremista, ¿por qué impiden que las familias y las víctimas puedan hablar?", pregunta Ryma Sheermohammad, intérprete y activista.

Estos envenenamientos han sucedido ya en quince ciudades haciendo que cientos de jóvenes enfermen y saldándose con la vida de algunas de ellas. "Una chica perdió la vida ayer. Fue una especie de bomba que alguien tiró al patio de la escuela", explica Ryma Sheermohammad.