Hunter Biden, el hijo del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, se ha declarado este jueves 'no culpable' de nueve cargos federales por presunta evasión de impuestos.
Biden, de 52 años, se ha presentado ante un juez de Los Angeles (California) para una primera audiencia en un caso en el que se le acusa de no haber pagado aproximadamente 1,4 millones de dólares en impuesto federales durante cuatro años, desde 2016 hasta 2019.
El hijo del mandatario demócrata enfrenta una imputación de nueve cargos, entre ellos la falta de declaración y pago de impuestos y declaración de impuestos falsa o fraudulenta. Según la Fiscalía, habría gastado "millones de dólares en un estilo de vida extravagante en vez de pagar sus impuestos".
Según la acusación, gastó el dinero en drogas, acompañantes, hoteles de lujo, vehículos de lujo o ropa, entre otros. En total, los cargos federales ascienden a una pena máxima de 17 años de prisión.
Los cargos contra él fueron presentados el pasado mes de diciembre por el abogado especial David Weiss, que examina el caso tras ser nombrado por el fiscal general, Merrick Garland, en agosto y fue nominado en 2017 por el entonces presidente Donald Trump. Weiss ya presentó una primera imputación contra el hijo del presidente por haber ocultado sus adicciones al adquirir un arma en 2018.
Esta primera audiencia llega un día después de que Hunter Biden se presentara por sorpresa ante un comité de la Cámara Baja controlado por los republicanos que está investigando el supuesto tráfico de influencias en negocios de la familia Biden para determinar si procede llevar al presidente a un 'impeachment'.
El hijo de Biden estaba citado a declarar a puerta cerrada el 13 de diciembre, pero en lugar de personarse ante el comité, solo dio una declaración ante la prensa a los pies del Capitolio, motivo por el que podría ser declarado en desacato.