Los servicios de emergencia israelíes han recuperado al menos 260 cuerpos sin vida del desierto próximo a la Franja de Gaza donde cientos de jóvenes celebraban un festival de música electrónica la madrugada del sábado, cuando Hamás irrumpió disparando.

Un portavoz de ZAKA, un grupo de voluntarios que se ocupa de recuperar restos humanos tras ataques y otros desastres, ha confirmado a medios israelíes que hasta ahora se han recogido más de 260 cadáveres del lugar donde se celebraba el festival de música en el sur de Israel, cerca del kibbutz Reim, próximo a Gaza.

Los cientos de asistentes al Festival de Música Nova fueron testigos de los cohetes lanzados a primera hora del sábado por las milicias palestinas desde Gaza. Posteriormente, llegaron al lugar milicianos armados, lo que provocó la huida en masa de los participantes mientras aún sonaba la música electrónica.

El festival había sido organizado coincidiendo con la festividad judía del Sukkot. Comenzó a las 23:00 horas del viernes y duró toda la noche con miles de asistentes, en su mayoría israelíes de entre 20 y 40 años. En las redes sociales se han difundido vídeos que muestran a los terroristas acercándose en parapente y a los asistentes huyendo aterrorizados, mientras algunos eran atrapados.

Entre los desaparecidos habría un ciudadano británico que trabajaba en la seguridad del festival, de acuerdo con la embajada de Israel en Reino Unido. El joven, de 26 años, estaba trabajando en la rave cuando, según el testimonio de su madre a 'Jewish News', la llamó para decirle que había cohetes sobrevolando el lugar. Posteriormente, le envió un mensaje tras el que no ha vuelto a tener noticias suyas.