El Gobierno de Estados Unidos se ha comprometido a entregar este martes a sus padres a por lo menos 50 niños indocumentados menores de cinco años del centenar que fue separado tras cruzar la frontera con México a consecuencia de su polémica política de "tolerancia cero" con la inmigración ilegal.
En una vista judicial con el magistrado Dana Sabraw en San Diego, California, abogados del Departamento de Justicia (DOJ) han explicado que dos de los niños ya han regresado con sus padres, mientras que harán lo propio este martes con otro grupo lo que permitiría llegar a una cifra de entre 54 y 59 menores.
De esta forma cumplirían en parte con el plazo impuesto por el juez de reunificar a los 102 menores con sus padres, fijado para este martes. Los abogados del Departamento de Justicia refirieron que en estos primeros casos el proceso fue más ágil dado que los padres continúan en custodia de las autoridades federales.
Este marte los menores serán trasladados con sus padres, quienes podrán continuar su proceso migratorio en libertad dado que las instalaciones donde están recluidos no están adaptadas para familias, informó Sarah Fabian, abogada del DOJ.
El magistrado citó a ambas partes de nuevo este martes para una vista en la que el Gobierno deberá presentar un plan para cumplir en su totalidad con el mandato, producto de una demanda colectiva interpuesta por la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU) para poner fin a la práctica de separación de familias.
Sabraw reconoció que en algunos casos será "imposible" que el Gobierno reúna a los menores con sus hijos dentro del lapso establecido, por lo que permitirá ciertas excepciones una vez que se le detallen los motivos. Se sabe que los padres de al menos nueve niños ya han sido deportados, mientras que otros doce enfrentan un proceso en una cárcel estatal o federal, por lo que no podrían estar con sus hijos en estas instalaciones.