Era la tercera vez que viajaba a Italia, pasaba unos días en Illaca, en la casa familiar de su novio italiano Christian, cuando la mala fortuna se cruzó en su camino.

Se llamaba Ana Huete Aguilar y tenía de 27 años. Ella dormía en la planta de abajo, según cuentan los familiares, cuando, al parecer, una viga le golpeó en la cabeza.

Natural de un pequeño pueblo granadino, Víznar, donde vecinos y familiares se acercaban a la casa de sus padres temiéndose lo peor.

Cuando el ministerio de Exteriores confirmó que había una víctima española, su novio, que resultó herido, aunque ya está fuera de peligro, les confirmó que se trataba de Ana.

El ayuntamiento de Víznar decretará varios días de luto, aunque según el alcalde, la familia "quiere mantenerlo en su entorno y desde el respeto".

Desde Exteriores aseguran que facilitarán todas las gestiones que necesite la familia, como es habitual en estos casos, aunque la familia se queja amargamente de que ya les han anticipado que no pagarán los gastos de repatriación. Los padres de Ana tienen previsto, junto a varios familiares, desplazarse en un vuelo a Italia.