Los profesores, que estaban armados con palos, piedras y cócteles molotov, prendieron fuego a parte de la sede del Partido Revolucionario Institucional en Chilpancingo,a lo que los agentes antimotines respondieron con gases lacrimógenos.
Dos maestros fueron detenidos por los policías, mientras que los profesores capturaron al subsecretario de Seguridad, por el que hicieron un intercambio horas después.
Los maestros, quienes acampan desde hace semanas en el Zócalo de la capital de Guerrero, han protagonizado numerosas protestas por la desaparición de 43 estudiantes de la escuela Normal de Ayotzinapa con acciones pacíficas, pero también con ataques violentos como el producido este martes.
Pese al recrudecimiento de la violencia, siguen predominando las marchas pacíficas como la de esta noche, en la que los mexicanos se unirán, portando velas, para decir "basta de destruir" el país, en una iniciativa ciudadana bajo el nombre de '11.11 luz para México'.
Por otro lado, el fiscal general, Jesús Murillo, se encuentra en el aeropuerto de Chilpancingo con los familiares de los 43 estudiantes para informarles sobre los avances en la investigación, después del encuentro realizado el viernes pasado en la misma terminal aérea.
En la reunión del viernes pasado, Murillo anunció a los familiares que tres miembros de Guerreros Unidos detenidos la semana pasada habían confesado haber asesinado y quemado durante 14 horas a más de 40 personas que dijeron ser estudiantes para no dejar rastro.
Después, el procurador ofreció una rueda de prensa en la capital mexicana, donde dijo que los estudiantes serían considerados "desaparecidos" hasta que las pruebas genéticas de los restos encontrados permitan su plena identificación.
Los familiares aseguraron que mientras no haya pruebas, seguirán exigiendo la búsqueda de sus hijos vivos, y que solo confiarán en los datos que les proporcionen los peritos argentinos.
Precisamente el martes se pronunciaron por primera vez el Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) que realiza un peritaje independiente a solicitud de los familiares, y explicó que los restos humanos analizados hasta ahora no son de los jóvenes.
El EAAF indicó en un comunicado que ha intervenido en la exhumación y, en algunos casos, en el análisis de los restos hallados en las zonas de Cerro Viejo y La Parota, en el municipio de Iguala, así como en el basurero y la orilla del río San Juan, en el vecino municipio de Colula.
"Hasta el momento, no ha habido identificaciones entre los restos recuperados en las tres localidades mencionadas y los 43 normalistas", señaló el equipo forense.
De los 39 cuerpos encontrados en las fosas de Iguala, aún faltan los resultados de las pruebas genéticas de seis, que estarán en breve, y de nueve más por realizar, mientras los restos hallados en el río y en el basurero serán analizados en un laboratorio de Austria.